18.12.06

ENTREVISTA AL CORONEL FLORES THIES

Se publica en Minuto Digital, y no hay más que añadir: ya se encarga el Coronel de decir lo necesario:

Entrevista
JESÚS FLORES, CORONEL RETIRADO

"En el Ejército nadie puede hablar, sólo lo pueden hacer los civiles metidos en DEFENSA, especialmente los lenguaraces ministros cuya incontinencia verbal es conmovedora"



Redaccion: 04.12.2006



Hace un par de semanas se hacía público un documento titulado 'Reflexiones', que venía firmado por más de 170 militares y en el que se realizaban duras críticas contra diversos asuntos de actualidad. Minuto Digital ha tenido oportunidad de charlar con uno de los firmantes, el Coronel retirado Jesús Flores, que ha respondido nuestras preguntas.

Hace unos días cerca de 170 militares firmaron un manifiesto en el que expresaban su desacuerdo con temas tan dispares como la memoria histórica o el Estatut ¿Cómo se fragua el manifiesto?

Digamos mejor “Reflexiones, porque “Manifiesto” suena a más solemne. Surgió del deseo de hacer públicas muchas de esas inquietudes y hasta rabias que sentimos, en este caso militares retirados y hasta por retirar, por la actual situación de España. Hablamos y nos quejamos, siempre dentro de nuestros círculos familiares y de amigos, pero nunca trasciende ni interesa a nadie que trascienda. Se trata de hacer de los militares un conjunto de ciudadanos de segunda, ciegos, sordos y mudos, con los que se puede hacer lo que se quiera sin tan siquiera consultarles. Esto, jamás se haría con otros profesionales o grupos sociales, incluidos ocupas, emigrantes o batasunos. No olvidemos que la presencia de mujeres da una dimensión distinta de la habitual a este tipo de escritos, manifiestos o reflexiones. Lo iniciamos media docena de retirados, lo dimos a leer a otros, corrió la voz, se adhirieron muchos con sus mujeres y también se sumaron viudas, hasta llegar a esa cifra de 171, que aumenta cada día, incluso nos piden ser incluidos desde el otro lado del Atlántico.

Por alguna de sus quejas se podría decir que son ustedes un grupo de militares franquistas ¿lo son?

Nosotros, que servimos a España en el Ejército durante el largo mandato de Francisco Franco, guardamos hacia él un tremendo respeto por su obra gigantesca de reconstrucción de España y por habernos librado del paraíso soviético con el triunfo del ejército nacional en la guerra civil que fue también de Liberación y Cruzada, mal que les pese a muchos. Para nosotros la guerra ya había acabado hace casi 70 años, pero si se ponen pesados, nos declaramos herederos del "Ejército Nacional". Si eso es ser "franquista", pues somos "franquistas".

¿Existe ese malestar entre el ejercito en activo? ¿hay ruido de sables?

Existe malestar en el Ejército, activo y “pasivo”. Los sabemos y lo saben los políticos actuales, pero miran para otro lado porque ven que la “Cúpula” militar, por razones que preferimos silenciar, callan y otorgan, lo que les permite ir apretando clavijas con un entusiasmo verdaderamente demoledor. La disciplina es lo último que se rompe en un Ejército, pero que nadie sueñe con arrasar las mismas esencias de España creyendo que el Ejército dejará hacer por simple disciplina. La disciplina, lo decimos en las “Reflexiones”, es algo que aceptamos porque somos libres, la sumisión es otra cosa. En cuanto a si hay “ruido de sables”, quizá mi oído artillero, lesionado después de tantos años oyendo la música magnífica del cañón, me ha endurecido el oído y no me deja percibirlo.

¿Supuso un antes y un después la retirada del lema "A España servir hasta morir” de la academia de Talern?

En aquella ocasión, los suboficiales nos dieron una lección de dignidad que hacía tiempo no se veía, salvo en casos aislados. Lógicamente, si los políticos se dedicaran a pensar, se darían cuenta de que no todo el monte es orégano y que, de no poner freno a sus desprecios hacía “lo” militar, cualquier día de estos podían llevarse un susto algo mayor que el ver nuevamente el lema de “A España servir hasta morir” reescrito en la montaña que domina el campamento.

¿Cuál es su opinión sobre la posición del Rey en todos estos asuntos?

Al rey se le utiliza como garantía de una unidad de España tambaleante, al menos hasta que no se le considere necesario. Entonces se iniciará una operación asfixiante para traer la república. Si el rey hubiera querido intervenir, muchas de las indignidades cometidas con nosotros, los militares, no se habrían cometido. Pero es que tampoco hace nada para impedir que él y la familia real aparezcan como estúpidos y risibles payasos en revistas y en programas de televisión. La impunidad de lo sectario se ha impuesto. Cuando en las “Reflexiones” decimos que no comprendemos ciertos silencios y gestos reales, por algo será.

¿cuál es su opinión sobre las misiones "de paz" del ejercito? ¿se parece tal y como opinan muchos españoles a una ONG moderna?

El Ejército es una carta más en la baraja política. Aznar quitó apresurada y anticipadamente el servicio militar obligatorio por razones electoralistas, además de echar fuera de Madrid uno de sus más antiguos museos, el del Ejército, hoy “desaparecido en combate”. El Ejército no es, a Dios gracias (todavía) una ONG, aunque las misiones de “paz” son cartas en esa baraja de los políticos, no importa el matiz o la secta.. Allí, cuando se muere (fallece) se hace “pacíficamente”, aunque te hayan puesto una bomba bajo el trasero, las medallas son amarillas, de paz… Mentiras y falacias políticas sobre el sacrificio y hasta la sangre de nuestros compañeros. Creemos que el Ejército debe acudir y cooperar en determinados lugares del mundo para poner orden, vigilar procesos electorales o para evitar males mayores, pero que no se olvide que el Ejército está preparado para combatir, no para hacer el ridículo como le han hecho pasar los políticos en alguna ocasión. Curiosamente, nadie vigila nuestros procesos electorales en las Vascongadas, elecciones que, en otro país civilizado, quedarían automáticamente invalidadas año tras año por no existir libertad ni seguridad para muchos de los votantes.

¿Cual debería ser el cauce para que el ejercito se pudiera expresar y transmitir su opinión a los ciudadanos?

En el Ejército nadie puede hablar, sólo lo pueden hacer los civiles metidos en DEFENSA, especialmente los lenguaraces ministros cuya incontinencia verbal es conmovedora. La “Cúpula Militar” se inhibe y calla, incluso en aquello que sabe que nos afecta o nos duele, como la eliminación de estatuas, monumentos, monolitos…, las condenas institucionalizadas que arrasan nuestras propias Hojas de Servicios, la eliminación de Museos, las leyes sobre ascensos, etc. España ha firmado unos convenios internacionales sobre el derecho militar a la asociación (¡ojo! no a la sindicación), que además permite la Constitución, pero lo prohíben las Reales Ordenanzas que es Ley de rango inferior. Nosotros, los retirados, no tenemos voz ante ese “Mando”, salvo en menudencias y festejos; los en “activo”, menos aun y con la espada de “Demóstenes” (Maruja Torres dixit) sobre sus cabezas si muestran la oreja. De esa forma, la impunidad más absoluta permite a unos políticos sectarios y revanchistas, hacer con nosotros lo que les de la gana. Nuestras “Reflexiones” han sido un intento, una prueba, para tratar de que nos oigan, pero los políticos y sus servidores de los “medios”, nos han silenciado. Gracias a esa prensa ”digital”, como la vuestra, nuestra voz ha corrido como loa pólvora, incluso saltando el charco hacia América. Sabemos que en DEFENSA miran con lupa las listas. Cuando los socialistas estaban en la oposición, allá por los años de UCD, clamaban por el derecho del militar a poder expresar su opinión, llegaron al poder y, no es que se olvidaran de sus promesas, es que hicieron del Ejército una institución tan muda como un cementerio."




Lunes, 18 de
Diciembre de 2006