GENERALES NO ESCARMENTADOS. 7-8 de Diciembre

<--Saludo de moda: medio fascista, medio militar y medio bendiciente. Para confraternizar

Noticia dialogada.

-Oiga, mire, que a ver si desmontamos la profesión militar; que antes, los tíos, eran tan anticonstitucionales y ahora se permiten leer la constitución en los discursos, como si estuvieran amaestrados, pero lo hacen para recordar que tienen la obligación de defenderla. Y no hay derecho: no necesitamos que la defiendan. La Consti sólo la pueden leer los políticos, los periodistas y algunos augures, mayormente para meter el dedo en el ojo de los artículos poco progresistas.

-¿Se refiere a eso de «patria común e indivisible de todos los españoles?»

-De algunos de los españoles. O sea, si ese general hubiera dicho lo contrario, que no tiene nadie por qué defender la Constitución y que el Estatú es cosa fina y hasta textil, ¿no se lo hubieran cargado también?

-Ciertamente. Todos los generales llevan escuchas, soplones de oficio, que avisan de cuando hay que rasgarse las vestiduras y hacer campaña.

-Luego la moraleja es «General mudo, empleo seguro.» Se los cargan por leer textos sagrados, sólo reservados a la casta sacerdotal. Y creo que también por ser sospechosos de votar al PP. Un Teniente General, un príncipe de la milicia, no va a votar a los descamisados.

-Oiga, oiga: para un momento. ¿Qué fue exactamente lo que dijo el general?
-No lo sé. Muy gordo sería porque nadie lo publica. Sólo dos o tres frases de las que llaman “fuera de contexto.”

-¿Y cómo podemos saber si era bueno o malo lo que decía? Es como un problema de la mente, o sea, un dilema.

-Lo sabemos por la fe en la unanimidad de las mayorías, que no se equivocan así como así. ¿Es que no se ha fijado en que todos los medios y todos los partidos pedían la cabeza del Teniente General? Por leer libros canónicos a los no iniciados: les ha dado una primera lectura cuando ya vamos por la vigésimo cuarta. ¿Ha visto usted un caso mayor de unanimidad desde que los periódicos proclamaron reina a Doña Leonor? Pues para que sucediera este milagro de consenso, está claro que el General Mena no debió leer la constitución nunca. Por su bien.

-Sin militares estaríamos mejor. ¿No dicen que las Constituciones son para guardarlas?

-En la vitrina, sí. Pero sin militares se pondrían a escuchar a los policías y ya va bastante mal la cosa de la delincuencia al estilo boina verde. En fin, que leer la consti es malo para la salud.

-Eso sí: da miopía, y estimula la hipófisis malamente.

-Y encima el general va y le dice al ministro: «si hubieras hecho lo que yo, te hubiera metido un paquete».

-Pero si el ministro lo hace todos los días. Vaga por los cuarteles como un misionero, explicando a los soldados la constitución y los métodos para «elastificarla».

-Sí: él es iniciático y los generales, no.